TENDENCIA 2020: COCINA DE ABUELAS
Las Recetas de la abuela son esos platos de cocina tradicional que traen todo el sabor y el amor de la experiencia de las abuelas. Todos guardamos con cariño esas recetas que con tanto mimo nos preparaban y, ahora, las preparamos nosotros para los nuestros.
Los ñoquis del 29, los fideos del domingo, el pollo al horno o las milanesas. Todos tenemos una relación especial con la cocina de nuestras abuelas y un apego diferente por algún plato en particular. Sea porque la receta tiene un ingrediente secreto que se viene pasando de generación en generación o simplemente porque no hay nada como el cariño que le pone una abuela cuando cocina para su familia.
Los platos de la abuela están cargados de aromas, sabores y recuerdos que ningún otro cocinero en el mundo puede replicar.
Este lazo se extiende mucho más allá de nuestras fronteras. Incluso, mucho más allá de las culturas de las cuales somos herederos (española, italiana, la judía o la árabe). La gastronomía cumple un rol central en alimentar, valga la metáfora, y reforzar las tradiciones de cada sociedad, transmitiendo valores, sabores y afecto.
En mis cursos, siempre les digo a mis alumnos que cierren los ojos para pensar en sus platos favoritos, ese plato que les llega al corazón. Efectivamente, la respuesta nunca lleva nitrógeno líquido ni millones de ingredientes, sus mentes no se van a la cocina de vanguardia, sus recuerdos siempre van a la cocina tradicional hecha por sus abuelas o madres. Platos que quedan en su alma para siempre.
¿Nunca te has preguntado cuál es el secreto de esas súper abuelas, que sin conocer nutrición ni haber estudiado cocina en le cordón bleu, saben tocarte el alma con sus platos? Pues tengo la intención en estas líneas de transformarte en una talentosa abuela llena de recursos en la cocina. ¡Prometo no teñirte el pelo de blanco!
En realidad, siguen patrones muy espirituales y de consciencia en su cocina, además se especializan, nunca saben hacer demasiados platos y siempre, siempre son las personas que más capacidad de reciclaje gastronómico pueden llegar a tener. No lo hacen de un modo consciente, porque cuando las cosas salen del corazón, no requieren de explicación ni de bases científicas, pero como sabes, ellas saben hacerte comer como nadie.
Aprendieron de dónde salía cada ingrediente, conocían las estaciones de cada alimento y lo que cuesta realmente cada uno de ellos, y con lo que cuesta no quiero decir el precio, sino que eran conscientes del sol que recibió, el agua que necesitaba y el gran valor de vida que contenía en su interior. Para ellas un tomate era algo de gran valor, para ti probablemente es esa esfera roja que cuesta muy poco en el mercado y se puede poner malo en la heladera. ¿Nunca te has planteado que cada vez que tienes una palta en la mano estas tocando un fruto de un árbol que estuvo alimentando a esa pieza durante 18 meses? Imagina el sol, la lluvia, su recolección durante tantos días. Es la magia de la vida en tus manos.
SECRETOS BÁSICOS PARA COCINAR COMO UNA ABUELA
- Nunca tenían prisa en la cocina: Son un ejemplo de poner el tiempo en algo. Cuando empezaron a cocinar, no había microondas ni aparatos de gran velocidad. Para ellas una olla express era algo demasiado avanzado. Siempre que estés cocinando, debes estar en la cocina, no hagas otra cosa, aunque estés cociendo pasta o arroz que es lo que más fácil te puede parecer, pon intención en ello. Quédate junto al alimento y muévelo de vez en cuando, mímalo, estate en ese presente, obsérvalo y disfruta.
- Daban valor a cada ingrediente: Se criaron en un momento donde la comida no abundaba tanto como ahora y costaba mucho trabajo comprar cada ingrediente. Por ello un simple pepino, era algo importante. En esta realidad capitalista con tantos productos disponibles, perdemos el norte y solemos comprar de más, fuera de temporada, productos traídos de muy lejos… Recuerda que cada tomate es un TESORO. Has de intentar ser consciente de que cada ingrediente te nutre y esta lleno de vida, que estuvo plantado en tierra, recibiendo la luz del sol, que alguien lo cuido y regó hasta que llego hasta ti. No olvides nunca su importancia.
- Pensaban en el fin: Ellas estaban focalizadas en el presente del cocinar, pero tenían claro que iban a hacer y lo tomaban como una forma de querer a los suyos. No siempre daban abrazos o decía un “te quiero” pero se encerraban en la cocina durante horas para dar a los suyos la mejor versión de sus platos. Cuando empieces a cocinar piensa en las personas a las que quieres querer con tus creaciones.
- Se especializaban al máximo. Si ibas a casa de tu abuela un domingo, seguro que no tenías dudas de lo que tocaba. Sabían muy bien lo que hacían porque tenían sus platos estrellas que repetían y perfeccionaban durante años. Su escuela comenzaba desde que se casaban, momento en el que se convertían en las jefas de cocina de esa familia.
- Nada se tira. Una abuela tiraba la mitad de la mitad que lo tiras ahora tú. Efectivamente ellas con un poco de arroz, 3 zanahorias y un puerro, podían hacer comida para 7 días y no repetir menú. Esto no tiene explicación, creo que eran extraterrestres que vinieron a la tierra a hacer esa multiplicación de los panes y los peces que se expone en la biblia.
Emilio R. Moya