LA IRONÍA DEL ASADO

UNA NOTA SIN TANTAS PALABRAS

 

 

Buenos día amables lectores. Esta mañana iba caminando mientras pensaba, que esta semana, me excedí con las palabras. Para ser exacto y según el Manual de Estilo, que yo mismo escribí como Editor de esta página, en 957 palabras. Una barbaridad.

 

 

Les pido disculpas por el exceso. Como diría el Chavo del Ocho, se me chispoteó. Sin embargo como siempre, los benévolos Dioses, me echaron una mano.

 

 

En ese preciso instante, salí de mi abstracción porque debía cruzar la calle y me topé con una carnicería que se emplaza en Boulevard Avellaneda y la Cortada más larga del Mundo, según nos jactamos los rosarinos, que no es otra que Marcos Paz.

 

 

Y allí cual Arquímedes en su bañera, exclamé para mis adentros Eureka, “lo tengo”, sé cómo disculparme con nuestros lectores. Hoy toca una nota visual, casi sin palabras, y si buscan palabras, les recomiendo donde encontrarlas, y mejores que las que pueda escribir yo.

 

LA CUESTIÓN DE LOS ASADOS

 

 

Porque en el tema en cuestión, disto de ser el mejor. Soy cocinero, y en eso sé que soy bueno. Pero en los asados, apenas me defiendo. Bien, si se trata de carnes. Mejor si son pescados o chivitos. Pero si me piden un simple pollo a la parrilla, salgo corriendo como el correcaminos.

Hay distinguidos colegas que han escrito sobre el tema y a ellos voy a dirigirlos. Y también hacia alguna nota que de casualidad me haya salido bien.

 

DE NUESTROS COLEGAS

 

El asado: ¿un invento uruguayo? Una recorrida por los orígenes y las particularidades de la comida favorita en el Rio de la Plata. Por Alejandro Maglione para La Nación

El mundo es de los cerdos, no de los sibaritas Por Claribel Terré Morell. Entrevista a Alejandro Maglione, presidente de la Asociación de Periodistas Gastronómicos de Latino América (APEGLA), miembro fundador de la Academia Argentina de Historia Gastronómica, de The Fork Club y del Grupo Gramajo.

Francis Mallmann: «El cocinero es como un amante, sabe de paciencia y de dónde y cómo poner las manos»en ABC de España

La domadora de fuegos: aprendió a hacer asados con su abuelo y hoy dirige una de las mejores parrillas porteñas Patricia Ramos quiso ser pastelera, pero desde hace seis años está al mando de un prestigioso restaurante derribando prejuicios de género. En INFOBAE

DE NUESTRA COSECHA:

 

“Sin asado no hay domingo”

“Una experiencia religiosa”

 

Hay muy buenos videos y con ellos voy a enlazarlos.

 

 

 

 

Pero lo que voy a mostrarles hoy es la fina ironía de los carniceros argentinos y sus carteles ingeniosos para atraer una clientela, cada vez más exigente y menos pudiente.

 

LA IRONÍA POPULAR Y EL ASADO

Comienzo por la carnicería que fue mi fuente de inspiración para la nota.

 

 

 

 

 

 

Para seguir, una carnicería de Río Gallegos generó furor en las redes sociales, luego de que se difundieran sus graciosos carteles para promocionar sus productos.

 

 

El negocio «El Extremo» se volvió famoso por los mensajes que fueron dejando por escrito en una pizarra, ubicada en la vereda frente al local de Congreso al 100, en ésa ciudad patagónica.

 

 

Con referencias a la crisis económica que atraviesa la Argentina, las relaciones de suegra-nuera, y citas falsas de Paulo Cohelo, escribieron mensajes con humor, tales como: Presupuestamos tu asado: cumpleaños, casamientos, bautismos, beibi chauer, divorcios, fallecimiento de suegra y otros festejos.

 

 

 

 

Tampoco les falta creatividad a los carniceros de Neuquén para aprovechar la Semana Santa.

 

 

 Ni a los del Alto Valle del Río Negro.

 

 

 

 

Ni a los entrerrianos.

 

 

O a los porteños.

 

 

O a indeterminados carniceros

 

 

Espero amables lectores, haberles devuelto el tiempo perdido en leer el exceso de palabras de esta semana. Ahora estamos a mano y me siento aliviado y en condiciones de retomar mi normal ritmo de escritura.

Gracias por la paciencia.

 

Emilio R. Moya

 

Fuentes: en este caso, se trata de un pueblo de la provincia de Santa Fe.