LA COCINA DE SU CORRIENTES PORÁ

 

LA COCINA DE SU CORRIENTES PORÁ

 

 

Buenos días estimados lectores. Ayer, mientras realizábamos la edición de la nota sobre el gran trabajo de los chefs de esta generación, que le está cambiando la cara a la cocina argentina, tuvimos una larga charla en la Redacción.

 

 

Que nos remontó a nuestras infancias, hace medio siglo, y a nuestros viajes en compañía de padres, tíos, vecinos y entenados, a la pesca deportiva del dorado, en Empedrado, Goya o Paso de la Patria, en la Provincia de Corrientes.

 

EL CHIPÁ GUAZÚ

 

Al descubrimiento de los sabores originales de una tierra, poblada de comidas que jamás habíamos probado antes, y que nos deslumbraron. Y también a algunos desconciertos, porque éramos niños, pero no tontos. Y lo que más nos llamaba la atención, era que durante todo el viaje, los adultos hablaban de qué íbamos tras la presa más difícil de pescar: el Tigre del Paraná.

 

 

Porque por lo que habíamos aprendido, los tigres eran originarios del Asia, y en nuestras selvas había yaguaretés, que nada tenían que envidiarles a sus primos del Asia.

 

 

El nombre yaguareté es de origen guaraní y significa “la verdadera fiera”. Es considerado un animal sagrado.

 

 

En Misiones, aborígenes y chacareros no lo nombran porque dicen que al invocarlo, aparece. Su fuerza, poderío y misterio protagonizan leyendas, mitos y también anécdotas e historias.

 

 

Pero así eran las cosas en las ciudades portuarias de la Argentina. Por más médico, ingeniero, mecánico o taxista que se fuera, los conocimientos gastronómicos se circunscribían, a las milanesas con papas fritas, el asado, las pastas, la pizza y las comidas propias de las colectividades de origen.

 

 

Decidimos entonces dedicar nuestra nota de hoy, a la cocina correntina, y allí nos encontramos otra vez, con una colega que honra a nuestra profesión, y a la que hemos traído, más de una vez, a nuestra páginas.

 

 

María Demichelis es periodista especializada en Gastronomía y Viajes y dirige la revista digital Sólo por Gusto, un medio de excelencia, al que seguimos, y que le hemos propuesto a ustedes, queridos lectores, que sigan.

Hace unos meses, por esas cosas de la magia que tiene nuestro litoral, se convirtió en la editora del libro “Cocina Correntina”, una obra que está basada en los escritos de Aurelio Schinini Cacace, un hombre que en vida se dedicó a la botánica y a estudiar la gastronomía del NEA. Y a partir de esos escritos, comienza nuestra historia de hoy.

 

EL PRÓLOGO

 

 

Aurelio Schinini Cacace, amigo entrañable de muchos, y apreciado por quienes lo conocieron, escribió una serie de notas sobre el arte culinario de la provincia. Falleció antes de que su libro viera la luz. Pero el 6 de mayo de este año en la Feria Internacional del Libro, en la ciudad de Buenos Aires, fue presentado y ése libro, con el que soñó.

 

 

Luego  la presentación se hizo en el Museo de Ciencias Naturales Amado Bonpland, de la ciudad de Corrientes.

 

 

“Mbaipy, mbeyú, chipá guazú, azúcar pé, kivevé, borí borí, mandioca frita, caí cuá, son más que recetas, esconden el orgullo de los que amasaron una cultura culinaria en un territorio ninguneado, poco explorado. Un disparate argento”, señaló en su Instagram una entrañable amiga.

 

 

El autor de Cocina Correntina, así se titula la obra, el investigador y docente Aurelio Schinini Cacace cuenta sobre los tesoros de la provincia en los textos compilados amorosamente por Estefanía Cutro.

 

Fernando Vargas Gómez, Estefanía Cutro y Carlos Lezcano en la presentación del libro Cocina correntina, en el Museo Bonpland.

 

Como se manifiesta en la red social, “editar este libro que comenzó siendo un modelo para armar… Se convirtió en el placer de asomarse a estos fogones donde brillan la mandioca y el maíz, las frutas y los dulces. Un paisaje cromático y sabroso sobre la mesa”.

 

El libro fue publicado por Leonardo Moglia, quien estuvo acompañando a la co-autora.

 

El libro también ilustra las costumbres, la religiosidad popular, la cosmovisión guaraní, el detrás del plato, en esta tierra.

 

 

 

EL AUTOR

 

 

Aurelio llegó para radicarse en Corrientes en el año 1972. Vino desde Asunción con el aval de destacados botánicos argentinos de esa época, podríamos decir que llegó de la mano de los grandes. Lo hizo con las alforjas cargadas de un gran amor por las plantas y de una gran predisposición para trabajar.

 

 

Trajo consigo su herbario personal, más de tres mil especies, que fueron incorporados al herbario de Corrientes. La mayoría de las plantas las había colectado en Paraguay, acompañado de la botánica Eugenia Bordas, su querida maestra y amiga.

 

 

Nació en Asunción el 4 de febrero de 1943 en el seno de un hogar de padres descendientes de italianos. De su madre, que coleccionaba orquídeas nativas, heredó el amor por las plantas.

Realizó sus estudios primarios como alumno pupilo en un colegio de sacerdotes jesuitas en San Miguel, provincia de Buenos Aires. Regresó a su tierra natal donde terminó el Bachillerato y paralelamente estudió artes en un instituto privado.

Realizó cursos de jardinería y se capacitó como técnico agrónomo. Trabajó en el Museo Andrés Barbero, con plantas medicinales y las bromeliáceas, a las que siempre dedicó un trato especial.

 

 

Por el aprecio y admiración de profesionales que lo trataron, en una cena en la capital paraguaya lo entusiasmaron para radicarse en Corrientes e incorporarse al grupo de jóvenes botánicos del Instituto de Botánica del Nordeste IBONE, y para continuar sus estudios universitarios.

Así comenzó una etapa definitiva de su vida entre los correntinos, que lo adoptaron y él los adoptó como propios.

LA EDITORA

 

María junto a Mauro Colagreco en la última edición del Prix Barón B-Edition Cuisine

 

EL 8 de mayo de 2022 en diálogo con Radio Sudamericana, María Demichelis destacó la variedad de la cultura culinaria correntina, además de resaltar que “debería ser mejor considerada”.

 

 

“Es una historia dentro de mil historias. Corrientes tiene mucha magia, y eso ayudó a la confección de este trabajo. Conocía a Estefanía Cutra co-autora de este libro, en una jornada gastronómica en Jujuy. Ella me comentó de su amigo Aurelio Schinini Cacace, y a medida que me iba contando el perfil de él, me iba enamorando sin siquiera conocerlo. Con el correr de los días fui entendiendo de la profundidad de Aurelio, por lo que fui descubriendo un universo gracias a él y a Estefanía.

 

 

Ella hacía de traductora, ya que Aurelio ya no se encuentra más entre nosotros. El libro está compuesto por escritos y artículos de él que fue redactando a lo largo de su vida. El trabajo nuestro estaba en darle un orden y una coherencia en forma de libro”

 

María junto a Gastón Acurio

 

“La cocina me atravesó desde chica. De la tradición de mis abuelas y por el hecho de haber empezado a cocinar a los 9 años. La cocina es un enorme caleidoscopio que puede ser mirado desde múltiples disciplinas. La cocina es el reflejo de la idiosincrasia de un pueblo. Basta con sentarse a comer en un lugar para saber cómo es su gente y su cultura, ya que la cocina es cultura. Es el espejo de un lugar y de la gente que lo habita”.

“Me sorprendió mi propia ignorancia al respecto, y de gran parte de los argentinos. La cocina correntina es un tesoro que fue ninguneado por mucho tiempo. Tiene una diversidad de recetas increíble, además de que hilvana la cocina con la religiosidad y con las costumbres.

La cocina correntina es un elemento que hay que poner en valor y darla a conocer al mundo de una mejor manera”

EL SUEÑO DE AURELIO SCHININI

 

 

EL LIBRO COCINA CORRENTINA

 

 

 

 

 

 

 

EPÍLOGO Y DESPEDIDA (*)

 

 

“Un comentario aparte merece su total entrega a tareas sociales. Su gran sensibilidad ante personas en situación de vulnerabilidad y desprotección social, en especial niños y ancianos, lo llevaron a cocinar con gran alegría en un comedor comunitario en el barrio San Gerónimo, donde impartía clases de cocina y era muy apreciado por la comunidad.

Por sus trabajos sociales, la Municipalidad de Corrientes lo nombró Ciudadano Ilustre otorgándole la Orden de Mérito correspondiente.

Ser amigo de Aurelio Schinini era una gran honra. Hacía de la amistad un culto y del humor inteligente e incisivo, una materia de estudio.

Siempre estaba con proyectos innovadores en carpeta y su espíritu inquieto e indómito franqueaba cualquier escollo.

 

 

Al enfermarse y ver a sus amigos cómo lo cuidaban, vio el fruto de su trabajo y dedicación. Falleció en Corrientes, el día 4 de marzo de 2018. Lo vi sonriendo, tranquilo, sereno, llevando un pequeño ramo de orquídeas entre sus manos.

 

Gomonia (Miltonidium) Don Aurelio Schinini FCA

 

Nunca había forecido en marzo la Gomonia Don Aurelio Schinini FCA, siempre lo hace en septiembre. Este año, sin embargo, adelantó su floración.

 

 

Cada vez que entre al vivero de orquídeas un picafor, sabré que sos Vos, querido amigo así que tendrás asegurado un poco de dulce néctar en retribución a los exquisitos licores de Yatay que supe disfrutar contigo. Buen descanso y no dejes de visitarnos para recordarte”.

(*) Su amigo Eduardo Flachsland

 

UN CIERRE MUSICAL PARA LOS QUE EXTRAÑAN SU PROVINCIA NATAL

 

 

Emilio R. Moya

 

Fuentes: citadas y enlazadas en la nota

 

Oscar Tarrío

Director Periodístico Chefs 4 Estaciones en Chefs 4 Estaciones / Ex Editorial Diario La Capital

NODO norte

Un suplemento del Diario La Capital

@nodonorteok
NODO norte
Tienda Objetos Deco Deli Catas Eventos